domingo, 16 de agosto de 2015

El libro negro del capitalismo ¿o del estatismo? 2 las guerras

Siguiendo con esta segunda parte del ensayo sobre el libro el "el libro negro del capitalismo" se enfoca principalmente en la guerra. Tal vez esta es la parte que algunos les pueda parecer decepcionante ya que se dedica a relatar los acontecimientos que ocurrieron durante los conflictos armados y muy poco habla del capitalismo que como se imaginaran también sale como el principal culpable aunque las pruebas que aporte son casi nulas.

Por desgracia para la humanidad el siglo XX empezó con el pie izquierdo sobre todo en Europa y duro así casi hasta la mitad del siglo. Primero fue el polvorín de los Balcanes que fue seguido por la primera guerra mundial la cual dio paso al periodo entre guerras, donde se dio la guerra civil española la cual al terminarse siguió casi inmediatamente la segunda guerra mundial. Estos terribles episodios dejaron sangre y dolor a una escala inimaginable. Todo este horror no se dio por culpa de empresarios capitalistas sino por los estados tanto democráticos como dictatoriales o imperialistas quienes actuaron bajos sus propios intereses geopolíticos y económicos.

Antes de meterme en el tema que atañe a los diferentes conflictos bélicos, me gustaría poner en evidencia que el capitalismo y el libre mercado no les convienen las guerras, por lo tanto es absurdo culpar al capitalismo de libre mercado como el planificador y gran beneficiado de las guerras. tan solo hay que usar un poco la lógica si tu comercias con tu vecino, él te vende cosas que tu no produces y a la vez tu le vendes productos que el no produce ¿ a ti te convendría asesinarlo o dejarlo lisiado para que no pueda seguir produciendo los productos que tu necesitas y a la vez quitándole la posibilidad de comprar los tuyos? o ¿a él le convendría hacer lo mismo? la respuesta lógica es "NO", por el contrario lo que más te beneficiaria es que a tu vecino le vaya bien para que pueda comprar más productos tuyos y a la vez el te venda productos de mejor calidad y mejor precio, y lo mismo a él le beneficiara que a ti te vaya bien.

Del ejemplo anterior cambiemos la palabra vecinos por países. El libre comercio nos beneficia a todos por lo que no se podría dar una guerra entre dos países si sus intercambios comerciales son importantes ya que la guerra solo perjudicaría a los dos. El interés de un capitalista es crear riqueza vendiendo sus productos y servicios, para lo cual necesita clientes y recursos los cuales se destruyen en una guerra,  pero no es así con los estados si quienes gobiernan no les importa ser los reyes aunque sea de las cenizas, por lo que un estado grande y fuerte en las manos equivocadas como ha mostrado la historia puede causar verdaderos estragos. Por eso entre menos poder tengan los gobernantes menos posibilidades tendrán de crear grandes desastres.

El premio Nobel de economía F.Hayek, uno de los grandes exponentes del liberalismo por desgracia en su juventud  se vio obligado a participar en la primera guerra mundial en Austria su país natal, el vio los horrores de la guerra con sus propios ojos por lo que al finalizar la guerra, el joven Hayek busco la manera de evitar la guerra y la respuesta la encontró en el liberalismo que defiende la escuela austriaca de economía, encontró que el libre mercado es la mejor manera de preservar la paz. Es frecuente acusar al liberalismo de guerras de agresión como las ultimas en el medio oriente de comienzos de este siglo, lo cual es completamente falso, los liberales sabemos muy bien que las guerras son perjudiciales para la gran mayoría y solo benefician los políticos, unos pocos empresarios y financieros que en convivencia con el estado se benefician del dolor y sacrificio de los ciudadanos en ambos bandos, esto  tiene un nombre y es corporativismo el cual nunca se debe confundir con liberalismo.

Antes de empezar a hablar de lo que le autor dice sobre la primera guerra mundial, me gustaría recordar que desde el siglo XIX hasta comienzos del siglo XX en Europa se vivieron los nacionalismos de manera muy fuerte que por desgracia solo hicieron darle más poder al estatismo que haciendo uso del monopolio de la violencia es decir del sistema judicial, la policía y los ejércitos llevaron a Europa a una guerra sin precedentes que fue conocida en esa época como la gran guerra por su magnitud y alcance. el autor denuncia que hubo diplomacia secreta y acuerdos  bajo mesa durante este conflicto, aunque sea cierto estos fueron hechos por políticos por lo que aquí el capitalismo en ningún momento tiene la culpa, también denuncia que hubo grandes empresas beneficiadas puesto que hubo empresas beneficiadas por sus cercanías con los gobernantes y no por satisfacer a sus clientes, este incentivo perverso es provocado por los estados que protegen los empresarios que se acercan a ellos, en estos casos el liberalismo brilla por su ausencia.

Un evento inesperado durante la primera guerra fue la salida de Rusia del conflicto negociando con Alemania su salida, este hecho trajo una gran cantidad de cambios en el país, como consecuencia de la revolución Rusa que después de muchos acontecimientos y guerras internas trajo un periodo de violencia. Después de la caída del Zar viene la toma del poder por los Soviets teniendo como líder a Lenin. de nuevo el autor aprovecha para culpar al capitalismo de la guerra civil ya que acusa a las potencias extranjeras que seguían en guerra de la injerencia en contra de la revolución Rusa apoyando el bando Zarista, Para el autor todo el que se oponga al comunismo es capitalista, lo cual es incorrecto, los que lucharon contra los Soviets eran estatistas solo que de diferente manera, los Soviets defendían el estatismo de tipo de partido único y sus adversarios de imperialismo, de ninguna manera vemos que el capitalismo fuera la bandera de los enemigos de la revolución. además el autor se le olvidad que la historia ha mostrado que el comunismo no es igual en todas partes, por ejemplo los Soviets y los comunistas Chinos no se llevaron bien la mayor parte del tiempo, que Mao fuera contrario a la URSS no lo hacia capitalista, también olvidad que los comunistas han matado también a otros comunistas.

La traición de las democracias de Europa occidental a la Alemania que llego al tratado de Versalles de la mano de los social demócratas fue un crimen además de una traición, que traería como consecuencia la entrada en escena del nacional socialismo Alemán encabezado por Hitler. De nuevo para el autor la culpa es del capitalismo cuando el tratado lo firmaron políticos no emprendedores capitalistas. Por el contrario el tratado en vez de fortalecer el capitalismo en Alemania lo destruyo, como suele pasar cuando se minan las bases del capitalismo y la libre empresa las consecuencias son negativas, aparecen en escena el desempleo, la miseria, las quiebras, la inflación, escasez y la destrucción general del país, situación que aprovecharon los nacional socialistas para encumbrar en el poder a Hitler y su camarilla. En el libro habla de que Hitler era un capitalista, solo se necesita ver un discurso de Hitler para ver como aborrecía al capitalismo, aunque no aplico al pie de la letra el socialismo tampoco fue un defensor del capitalismo y mucho menos del liberalismo.

El episodio más trágico y triste de la historia española ha sido su guerra civil, hasta el día de hoy las heridas siguen abiertas siendo aun motivo de discordia. Este lamentable episodio como se puede esperar del libro de nuevo pone como protagonista de la tragedia al capitalismo. Acusa a al capitalismo adjudicando que los fascistas y los nazis eran capitalistas y al ayudar a franco a finiquitar la guerra pues son culpables indiscutiblemente, Pero si hacemos un razonamiento mínimamente lógico  este argumento no tiene ni pies ni cabeza, los fascistas y los nazis dan su apoyo a Franco después de empezada la guerra y los bombardeos de la aviación nazi fueron al final de la guerra ya que practicante Franco tenia ganada la guerra, solo era cuestión de tiempo que llegara al poder, también deben reconocer que Franco era un militar, no un economista y como tal no tenia claro un plan económico para su país, lo único que se sabia es que era un anticomunista, pero de eso a afirmar que era un capitalista falta mucho. Si hay un culpable de la guerra no fue el capitalismo, lo fueron las ambiciones de los estatistas por hacercen con el poder de gobernar e imponer su voluntad a los españoles.

Para terminar el último delito del capitalismo para el autor fue la segunda guerra mundial a pesar de que sus pobres acusaciones se centran en el corporativismo imperante en las potencias implicadas, en una guerra en la que muchas empresas se vieron en medio de la guerra no les quedo otra salida que escoger un bando, y lo lógico es que escogieran el más cercano a ellas. Como dije antes la guerra y el estatismo crearon incentivos perversos que hicieron que empresarios y financieros tomaran posiciones en las guerras hasta el punto que algunas sirvieron en los dos bandos. por otro lado acusa al fascismo y al nazismo de capitalista , solo es cuestión de escuchar algún discurso o leer algunas declaraciones de estos dos para encontrar que eran enemigos del capitalismo, el cual fue otra de las víctimas de esta guerra donde se creo una economía de guerra de la cual el mayor beneficiado fue el keynesianismo una de las ramas modernas del socialismo, Que por desgracia sigue vigente en nuestros días, por lo tanto de nuevo el capitalismo de libre de mercado es inocente de la tragedia nacida de políticos y gobernantes envestidos de poder absoluto.




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