Siguiendo con esta segunda parte
del ensayo sobre el libro el "el libro negro del capitalismo" se
enfoca principalmente en la guerra. Tal vez esta es la parte que algunos les
pueda parecer decepcionante ya que se dedica a relatar los acontecimientos que
ocurrieron durante los conflictos armados y muy poco habla del capitalismo que
como se imaginaran también sale como el principal culpable aunque las pruebas
que aporte son casi nulas.
Por desgracia para la humanidad
el siglo XX empezó con el pie izquierdo sobre todo en Europa y duro así casi
hasta la mitad del siglo. Primero fue el polvorín de los Balcanes que fue
seguido por la primera guerra mundial la cual dio paso al periodo entre guerras,
donde se dio la guerra civil española la cual al terminarse siguió casi
inmediatamente la segunda guerra mundial. Estos terribles episodios dejaron
sangre y dolor a una escala inimaginable. Todo este horror no se dio por culpa
de empresarios capitalistas sino por los estados tanto democráticos como
dictatoriales o imperialistas quienes actuaron bajos sus propios intereses geopolíticos
y económicos.
Antes de meterme en el tema que
atañe a los diferentes conflictos bélicos, me gustaría poner en evidencia que
el capitalismo y el libre mercado no les convienen las guerras, por lo tanto es
absurdo culpar al capitalismo de libre mercado como el planificador y gran
beneficiado de las guerras. tan solo hay que usar un poco la lógica si tu comercias
con tu vecino, él te vende cosas que tu no produces y a la vez tu le vendes
productos que el no produce ¿ a ti te convendría asesinarlo o dejarlo lisiado para que no pueda seguir produciendo los productos que tu necesitas y a la vez quitándole la posibilidad de comprar los tuyos? o ¿a él le convendría hacer lo mismo? la respuesta
lógica es "NO", por el contrario lo que más te beneficiaria es que a
tu vecino le vaya bien para que pueda comprar más productos tuyos y a la vez el
te venda productos de mejor calidad y mejor precio, y lo mismo a él le beneficiara
que a ti te vaya bien.
Del ejemplo anterior cambiemos la palabra
vecinos por países. El libre comercio nos beneficia a todos por lo que no se podría
dar una guerra entre dos países si sus intercambios comerciales son importantes
ya que la guerra solo perjudicaría a los dos. El interés de un capitalista es
crear riqueza vendiendo sus productos y servicios, para lo cual necesita
clientes y recursos los cuales se destruyen en una guerra, pero no es así con los estados si quienes
gobiernan no les importa ser los reyes aunque sea de las cenizas, por lo que un
estado grande y fuerte en las manos equivocadas como ha mostrado la historia
puede causar verdaderos estragos. Por eso entre menos poder tengan los
gobernantes menos posibilidades tendrán de crear grandes desastres.
El premio Nobel de economía F.Hayek, uno de
los grandes exponentes del liberalismo por desgracia en su juventud se vio obligado a participar en la primera guerra mundial en Austria su país natal, el
vio los horrores de la guerra con sus propios ojos por lo que al finalizar la
guerra, el joven Hayek busco la manera de evitar la guerra y la respuesta la encontró
en el liberalismo que defiende la escuela austriaca de economía, encontró que
el libre mercado es la mejor manera de preservar la paz. Es frecuente acusar al
liberalismo de guerras de agresión como las ultimas en el medio oriente de
comienzos de este siglo, lo cual es completamente falso, los liberales sabemos
muy bien que las guerras son perjudiciales para la gran mayoría y solo
benefician los políticos, unos pocos empresarios y financieros que en
convivencia con el estado se benefician del dolor y sacrificio de los
ciudadanos en ambos bandos, esto tiene
un nombre y es corporativismo el cual nunca se debe confundir con liberalismo.
Antes de empezar a hablar de lo que le autor
dice sobre la primera guerra mundial, me gustaría recordar que desde el siglo
XIX hasta comienzos del siglo XX en Europa se vivieron los nacionalismos de
manera muy fuerte que por desgracia solo hicieron darle más poder al estatismo
que haciendo uso del monopolio de la violencia es decir del sistema judicial,
la policía y los ejércitos llevaron a Europa a una guerra sin precedentes que fue
conocida en esa época como la gran guerra por su magnitud y alcance. el autor
denuncia que hubo diplomacia secreta y acuerdos
bajo mesa durante este conflicto, aunque sea cierto estos fueron hechos
por políticos por lo que aquí el capitalismo en ningún momento tiene la culpa, también
denuncia que hubo grandes empresas beneficiadas puesto que hubo empresas
beneficiadas por sus cercanías con los gobernantes y no por satisfacer a sus clientes,
este incentivo perverso es provocado por los estados que protegen los
empresarios que se acercan a ellos, en estos casos el liberalismo brilla por su
ausencia.
Un evento inesperado durante la primera guerra
fue la salida de Rusia del conflicto negociando con Alemania su salida, este
hecho trajo una gran cantidad de cambios en el país, como consecuencia de la revolución
Rusa que después de muchos acontecimientos y guerras internas trajo un periodo
de violencia. Después de la caída del Zar
viene la toma del poder por los Soviets teniendo como líder a Lenin. de nuevo
el autor aprovecha para culpar al capitalismo de la guerra civil ya que acusa a
las potencias extranjeras que seguían en guerra de la injerencia en contra de
la revolución Rusa apoyando el bando Zarista, Para el autor todo el que se
oponga al comunismo es capitalista, lo cual es incorrecto, los que lucharon
contra los Soviets eran estatistas solo que de diferente manera, los Soviets defendían
el estatismo de tipo de partido único y sus adversarios de imperialismo, de
ninguna manera vemos que el capitalismo fuera la bandera de los enemigos de la revolución.
además el autor se le olvidad que la historia ha mostrado que el comunismo no
es igual en todas partes, por ejemplo los Soviets y los comunistas Chinos no se
llevaron bien la mayor parte del tiempo, que Mao fuera contrario a la URSS no
lo hacia capitalista, también olvidad que los comunistas han matado también a
otros comunistas.
La traición de las democracias de
Europa occidental a la Alemania que llego al tratado de Versalles de la mano de
los social demócratas fue un crimen además de una traición, que traería como
consecuencia la entrada en escena del nacional socialismo Alemán encabezado por
Hitler. De nuevo para el autor la culpa es del capitalismo cuando el tratado lo
firmaron políticos no emprendedores capitalistas. Por el contrario el tratado
en vez de fortalecer el capitalismo en Alemania lo destruyo, como suele pasar
cuando se minan las bases del capitalismo y la libre empresa las consecuencias
son negativas, aparecen en escena el desempleo, la miseria, las quiebras, la inflación,
escasez y la destrucción general del país, situación que aprovecharon los
nacional socialistas para encumbrar en el poder a Hitler y su camarilla. En el
libro habla de que Hitler era un capitalista, solo se necesita ver un discurso
de Hitler para ver como aborrecía al capitalismo, aunque no aplico al pie de la
letra el socialismo tampoco fue un defensor del capitalismo y mucho menos del liberalismo.
El episodio más trágico y triste
de la historia española ha sido su guerra civil, hasta el día de hoy las
heridas siguen abiertas siendo aun motivo de discordia. Este lamentable
episodio como se puede esperar del libro de nuevo pone como protagonista de la
tragedia al capitalismo. Acusa a al capitalismo adjudicando que los fascistas
y los nazis eran capitalistas y al ayudar a franco a finiquitar la guerra pues
son culpables indiscutiblemente, Pero si hacemos un razonamiento mínimamente lógico este argumento no tiene ni pies ni cabeza,
los fascistas y los nazis dan su apoyo a Franco después de empezada la guerra y
los bombardeos de la aviación nazi fueron al final de la guerra ya que
practicante Franco tenia ganada la guerra, solo era cuestión de tiempo que
llegara al poder, también deben reconocer que Franco era un militar, no un
economista y como tal no tenia claro un plan económico para su país, lo único
que se sabia es que era un anticomunista, pero de eso a afirmar que era un
capitalista falta mucho. Si hay un culpable de la guerra no fue el capitalismo,
lo fueron las ambiciones de los estatistas por hacercen con el poder de gobernar
e imponer su voluntad a los españoles.
Para terminar el último delito
del capitalismo para el autor fue la segunda guerra mundial a pesar de que sus
pobres acusaciones se centran en el corporativismo imperante en las potencias
implicadas, en una guerra en la que muchas empresas se vieron en medio de la
guerra no les quedo otra salida que escoger un bando, y lo lógico es que
escogieran el más cercano a ellas. Como dije antes la guerra y el estatismo
crearon incentivos perversos que hicieron que empresarios y financieros tomaran
posiciones en las guerras hasta el punto que algunas sirvieron en los dos
bandos. por otro lado acusa al fascismo y al nazismo de capitalista , solo es cuestión
de escuchar algún discurso o leer algunas declaraciones de estos dos para encontrar
que eran enemigos del capitalismo, el cual fue otra de las víctimas de esta
guerra donde se creo una economía de guerra de la cual el mayor beneficiado fue
el keynesianismo una de las ramas modernas del socialismo, Que por desgracia
sigue vigente en nuestros días, por lo tanto de nuevo el capitalismo de libre
de mercado es inocente de la tragedia nacida de políticos y gobernantes
envestidos de poder absoluto.
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